Antes de la elección, ellos se
organizan, según, escala de valores y de
poder. Su, único, fin disfrute, lucro,
fácil e inmediato. Aparecen en momentos
transitorios, como decía mi abuela, “a río revuelto ganancia de
pescadores”. Están como, Dios, en todas partes. Nada, ni nadie, les son ajenos.
Viven de ello. Saben, todo, de todos y se aprovechan de lo que pueden, en el
momento que pueden. Actúan, como las termitas, en la sombra. Cuando, nadie, les
ve y en el momento en que, la victima es, más, vulnerable. Desde la cúpula de
la pirámide, hasta, su base. Solos, acompañados o en grupo, nadie se libra de
su terror.
Empecemos por la familia, sea cristiana, budista, agnóstica o
musulmana. Los grandes crímenes y robos individuales, se dan en la familia. La
mayoría salen a la luz, otros, se pierden, en la inocencia e indefensión de los
infelices… ¿Dónde buscan, los pedofilos,
a sus victimas? En casa…en las guarderías… escuelas… catequesis…clubes…
orfanatos… acogida de menores…
“¡Bendito seas, San Anonymous! Por todos
los angelitos que sufren, a diario, y aquellos que están, en el cielo.
¡San Anonymous, bendito seas! En nombre
del martirio de los inocentes y en
nombre de los pobres, indefensos, de éste, vil, suelo.
¡Bendito seas por siempre! San Anonymous.
Amén.”
¿Dónde encuentran negocio, los crápulas? En casa…en los asilos…residencias… hospitales… ¡Si los niños
y los muertos hablaran!
Pero… volvamos, nuestros, misericordiosos,
ojos y miremos, a nuestra casa consistorial, a nuestra familia social. Aquella,
que debería cuidar de nuestro bien estar y seguridad. ¡Que para eso está
constituida! ¿O no? ¿Y qué vemos?
Sí, qué vemos, si, el fanatismo, la
vergüenza o la impotencia no cegasen, el
entendimiento. Sí, ¡qué vemos! Simplemente, que en un plis-plas, unos
pocos, han hecho el agosto… septiembre…Y nos han
arrinconado, en cruel invierno, sin, miserable, abrigo. Invierno,
que cala muy dentro, corta la
respiración y deja alma y corazón fríos como témpanos.
-¡Bellacos!-
Se reúnen, cuatro y el del tambor. Los
asaltadores son gente experta, en el arte del saqueo. Saben, dónde se
encuentra, la riqueza a expoliar. El tambor suena, gracias, a la pericia de
constructores, contratistas, arquitectos,
abogados y bancos. Juntos, en cristiana comunión, deciden quiénes del pueblo tiene, la
familia, más, numerosa y bien avenida. Suman votos por cantidad y no por
calidad… ¡Y bingo! Una vez constituida, la manjúa y para que la red esté, bien,
formada tienden, las artes, al sol que, más, calienta y amarran, la
plomada, dónde sea preciso. En cada
puesto clave, un amigo de lo ajeno. No hay color, credo o profesión que escape,
a tamaña tentación. Por lo general, son seguidores de San Primo y se mueren por
probar, la ambrosía del becerro de oro.
¡La marmita-marmitako está servida!
Se olvidaron pero de una cosita…Tantos
años sentaditos, en sillón, deciden
pasar de ser vasallo a señorón…Reúnen, cuatro, amigos y el del
tambor y ya tenemos, nueva, canción.
Esto sucede, aquí, allá, y en casa de la Bernarda.
Los malhechores mantienen sus ficheros, al
día. Saben qué terrenos, edificios y demás joyas de la corona están, a punto de
caramelo, para sus boquitas de piñón… En, el abanico de posibilidades, eligen
la más fácil y menos costosa. Como bestias,
seleccionan, las victimas indefensas a devorar, viudas, jubilados,
enfermos, mujeres solas…
Analizan, paso a paso, la situación de
esas personas. Si tienen familia. Si, la familia está cerca. Cuál es su
situación monetaria. Qué pensión reciben. Si tienen o no tienen dinero, en el
banco…Y así, hasta controlar, el, más, mínimo detalle de su vida cotidiana.
Llevar a cabo todo control, va,
implícito, en el puesto clave otorgado,
a la gang.
Empieza la cuenta, atrás. En, “el mobbing
del robbing”, acosando y robando…
Lo primero que aparece son las termitas.
¡El edificio tiene termitas! En el edificio, donde vivían, dos, familias de
poca monta, “compran”, el que está vacío. El caso, puede darse, al revés primero, “compran”, y
luego se presentan… las termitas. Si, los, antiguos, vecinos se ponen
remolones…En, el piso, recién comprado, se mueve, una viga maestra…los recién
llegados se encargan de divulgan, el hecho, por la vecindad y alrededores, a bombo y
platillo…que si corre peligro, el edificio…que si está inclinándose…que si…
Los vecinos, alarmados y presionados,
empiezan, su particular vía cruces…Hasta, terminar, en el mejor de los casos,
con un apartamentucho de, 65m2, embotado, en una barriada, ajena, a sus
amistades y necesidades. Los infelices, agraciados, consiguen, ésa, pordiosera
limosna, a cambio de, propiedades con
más de cien m2. En lugares céntricos, estratégicos y con excelentes vistas.
Y cuando digo, en el mejor de los casos,
lo recalco porque, gente que ha tenido que tragarse, “el corderito de la
rehabilitación”, comenta que, un buen número de jubilados, pobres, acabaron, en
manos de las hermanitas de la caridad.
Antes,
que, a mí, me sucediera, lo que me está ocurriendo, un tal, Kepa, me
contó cuanto le habían hecho padecer, a él, y a su familia, los intocables,
hijos de Caín.
Poseían, una propiedad cerca dónde, hoy,
existe un cine. Cuando, me contó, las barbaridades que había sufrido y todo lo
que estuvieron maquinando y ejecutando,
los bandidos y el del tambor, pensé que
estaba exagerando. Cada vez, que charlábamos, me explicaba una detallito, de
éste o de aquel, desgraciado o de, aquella, desgraciada…que… les había
sucedido… esto… aquello…Siempre, terminaba diciendo… “lo peor, no te lo
cuento”…
Ahora, ya sé el porqué…Hay cosas que dan
apuro…vergüenza…miedo ¡Y de eso se aprovechan, la banda, tutti fruti!
Un día Kepa, me llevó, al lugar del crimen
y señalándome, dijo: “Ves, cómo no quise hacer lo que, ellos, querían, en el
terreno, me obligaron a… y todo para poner, un banco y una farola… Perdí,
mucho, dinero, tiempo y salud, pero, no me importa… ¡Tú, ándate con pies de
plomo porque estás tratando, con verdaderos delincuentes!”
Hoy puedo decir, con conocimiento de causa
que, no, se equivocó y lo que, él,
callaba, en agradecimiento, lo suelto yo…
Compré la casa, en Portugalete para convertirla,
en vivienda y academia. La operación se realizó, con el resto de un dinero que
me había dado, mi madre, el préstamo de una amiga y la hipoteca de, mí, nomina
y vivienda.
Estaba calculado para que fuera, una
inversión y solución, a nuestras necesidades, bien, aprovechada. Por un lado,
la academia que se instalaría, en la parte que da a la calle, María Díaz de
Haro, haría la labor de continuidad de los alumnos que teníamos, en verano en
la academia de Castro-Urdiales y en las
Arenas.
Por otro, la vivienda habitual frente al
lugar más bonito de la ría. ¡Una delicia!
Quienes me vendieron, el piso lo dejaron
en perfectas condiciones, incluido,
portal, escalera y camarote. Los,
demás, elementos estaban como cabe esperar de una casa, con solera. Nos pusimos
manos a la obra. Limpieza, general, por dentro y por fuera. Pintamos toda la
casa. Actualizamos, lo necesario para abrir la academia. Acondicionamos el
jardín. ¡El piso quedó divino! Y el jardín para mí, un edén. Frente a la ría de
Ibaizabal, en el corazón del Nervión, al lado del Puente Colgante y cerca, de
mis queridos vecinos de las Arenas, que más que vecinos, han sido, la buena y necesaria familia. Y lo
principal, obtuvimos, el permiso del ayuntamiento para ejercer la actividad.
Éramos felices, después, de todo lo que
nos habían hecho pasar, Jacinto Lo Coco
Cortázar y familia, con la ayuda de la Notaria Arenal.
-Jacinto Lo Coco Cortázar, había donado a
sus hijos, sin mi
permiso, una lonja en Castro-Urdiales y el piso de, Las Arenas, vivienda habitual. La donación se realizó, en la
Notaría Arenal. Los
notarios de la Notaria Arenal , son,
consuegros de, Narcisa Lo Coco
Cortázar. Suegros y cuñados de, María Nieves López Lo Coco.
Donó las, propiedades, completamente hipotecadas.
Hipotecas, realizadas, como habitual,
sin mí consentimiento. Cerca de
dieciocho millones de las
antiguas pesetas. Al de
quince días de
recibir, la envenenada, donación, La
Caixa , quiso cobrar
de inmediato, la deuda, adquirida, con
Jacinto Lo Coco Cortázar y nos
dio, cuatro meses para pagar o el desahucio.-
Habíamos comprado, el mobiliario y el
material necesario para empezar, las
clases. Los alumnos sabían dónde encontrarnos. La propaganda de la, nueva, academia
se había buzoneado. ¡De maravilla!
Estábamos
hipotecados, hasta, las cejas, pero, como, yo, recibía una pensión, mis
hijos trabajaban, en la academia y no había gastos de mantenimiento, limpieza,
cuentas…porque el trabajo lo repartíamos entre los tres. ¡El negocio, viento en
popa! Mejor de lo que esperábamos, principalmente, gracias al elevado número de
aprobados y a la chavalada, ¡Más majos no los hay! Junto, con sus
familiares se encargaron de dar, las señas
de la, nueva, academia, en Portugalete.
De pronto, en el solar del, antiguo, hotel
de Portugalete, obras, estruendos.
Se abre un boquete en el solar, por la
avaricia y la falta de estudio, previo. Boquete que, de inmediato, se llenó de
agua, proveniente de la ría. ¡El gran socavón! (prensa, años noventa)
Comienza, nuestro, terrible vía crucis.
Asentamiento de estructura, deformación
de marcos, grietas. ¡Un desastre! Todo gozo en un pozo...mejor dicho, todo,
gozo en el gran socavón… De inmediato, hubo que suspender la inauguración de
la academia, con sus gastos y contra
gastos, invertidos ¡Quién se atrevía a poner, en riesgo la vida de los alumnos!
El edificio, dónde íbamos a instalar, la
academia consta de, tres, pisos. Por entonces, vivía una familia. Esa familia
vivía, allí, de toda la vida y sola, por
decenas de años. Se encargaba de las cuentas
y de los gastos, comunes, del
edificio Tanto, los propietarios del tercer piso como del segundo, que estaba vacío, y los vendedores de, nuestro, piso eran familia. No tuvimos
inconveniente, en que siguieran llevándolas. Los familiares, con los que
habíamos tratado fueron, correctos en
la venta, educados en el trato y humanos en la relación. ¡Quién se iba a
imaginar, semejante, tinfano!
Entre,
muchas, alegrías con propiedad ajena, la familia del tercero, estuvo
alquilando durante dos años, mi parcela de garaje, sin permiso.
-No
nos dejó, y aún seguimos, sin tomar posesión de un tercio de camarote,
designado en escritura.-
Y…mientras tanto, el ataque al edificio y,
principalmente, al primer piso y planta baja que corresponde, a mi propiedad.
A raíz, de las obras que se estaban
realizando, en el solar del, Antiguo, Hotel de Portugalete. Con, mí, propiedad,
tan privada como, la propiedad de la Fundación o Patronato Manuel Calvo, se estaba cometiendo, un despropósito, sin par.
Instalaron, sin, mí permiso, un cuadro de luz con potencia de obra, en la pared
del edificio. El cuadro abarcaba, la pared de, una habitación, del, 1º, piso.
Tomaron, verja y muro de mi vivienda
para uso múltiple. Cerraron, el acceso
del cantón, apoyando, el peso, en el pilar de mí casa. Todo ello, consentido por el ayuntamiento de
Portugalete, La Fundación
o Patronato, Manuel Calvo y las autoridades que manejaban y manejan, dicha,
fundación que son, los mismos, de los
mismos.
Las denuncias realizadas, en el
ayuntamiento, respeto, al peligro, dejadez, abuso de poder y otras yerbas,
venenosas, juntan, más, de cuarenta y tantas. No sé cuántas, entre municipales…
ertzantzas…
Otras, de tal pelo, envié, al Lendakari, a
los partidos, a obras del puerto…
- El gran socavón, además, del peligro que
representaba para, todo, pichichi, estaba sin cercar, a merced del ángel de la
guarda de cada cual…y el suelo, de la plaza se estaba hundiendo… Merced, a los jubilados que hacían
su paseo, rutinario, Puente Colgante, plaza del Solar, canilla. Me fui enterando,
qué eran los anclajes, para qué servían y las consecuencias del reflujo del
agua de las mareas, en la base del
edificio y en los edificios contiguos, siendo como es, terreno ganado, a la
ría.
En
los escritos enviados,
marqué con aproximación,
dónde y
porqué se iba
a hundir la plaza.
Respondieron, que, el
ayuntamiento, les había dicho que
la plaza, no, corría peligro. Al poco, la
plaza se hundió
en el lugar vaticinado. (Recogido en prensa)-
A la par que atacaban, al edificio, a mí,
me tiraban piedras, me empujaban, rompían puertas, ventanas, buzón de correos,
llamadas telefónicas, amenazas…cuenta y sigue…
Me tiraban, anguilas vivas, mientras
trabajaba, en el jardín. Y, fuera dónde
fuese, se hacían ver, unos individuos que, por la cara y los andares, parecían personas poco recomendables. Luego,
Polifemo… y un tiempo, después, se presentaba, a la hora que yo salía, cambiase
o no de horario, un antiguo remero que trabajaba de jardinero, en el
ayuntamiento de Castro-Urdiales y era compañero de Juan Cruz.
- En tiempos de, un periódico local, Juan Cruz, puso a la mujer, como es
costumbre, entre, cobardes y reprimidos.
Masian, era una mujer que, en aquellos momentos, no se podía
defender y los desalmados, con su, mala,
baba, la arrastraron…Y, el troglodita de, Juan Cruz, aprovechándose, de la
indefensión de la mujer, hace un comentario,
diciendo que, él, hubiera preferido
estar con una burra… Lo único que escribí desde, el Colectivo de Mujeres
La Pimienta ,
fue:
¡Pobre burra! A... las... mujeres... me...
remito… no, dije nada más que eso…pero parece ser que, al menda, no le
agradó… Desde entonces, tengo, a ese pajarito y a
otros de tal pluma, haciendo lo que manda,
el gasolino de turno… Unas veces,
corren, otras veces vuelan… mas, él, sus primitos y
hermanitas tienen, calentito, el cocido en la cazuela…
¡En video están de un mono subido!
A propósito, todos
los artículos publicados en el periódico local de
Castro-Urdiales, Proel, bajo, el nombre de Colectivo de Mujeres, La Pimienta , son míos. En
aquellos tiempos…una mujer separada… tenía menos derechos, aún, que una casada…
para que se publicaran, los artículos, era necesario, adjuntar, nº, del DNI.
Yo, recién separada, no podía exponerme.
Y, más, teniendo, como tenía, a unas cuantas,
Virgo Potes, Virgo Fideles y Estrella de la Mañana , dispuestas, a cantarme, el gori gori, en nombre de la http://www.youtube.com/watch?v=2vRu9L9GWqU
decencia que tenían, guardadas a cal y canto, en los confesionarios. ¡Pecadoras! Menos mal, que Dios, en su
infinita dulzura, se las llevó, de éste valle de lágrimas, antes
de que probaran, en
sus propias carnes, las separaciones, uniones y arrejuntamientos, de sobrinas de su alma y
del corazón de María.
Las compañeras del colectivo,
solidariamente, se prestaron
a poner el número de su DNI. ¡Gracias, a
todas! en especial, a Cuqui.-
Yo, seguía denunciando y denunciando, los
abusos que se realizaban, en las obras del Gran Hotel de Portugalete… Hotel
Puente Colgante, o, como quiera que se llame. Los comerciantes, dirigieron, un documento, al ayuntamiento,
reclamando, el pronto arreglo de aquella situación. La vecina del tercero
firmó, el documento, yo también.
Al ver que, el vecino del tercero que, según el, representaba, a sus cuñados y
era quién llevaba, las cuentas de la
comunidad, no hacía nada para poner fin, a tamaño abuso. Y viendo que, el
edificio, donde está situada, mi casa corría riesgo evidente. Hablé con su
mujer y la dije que se tendría que hacer, una denuncia como comunidad y, a la
vez, contratar, a un técnico para
verificar los daños de cada vivienda. Finalmente, después, de mucho insistir,
los vecinos asintieron, en contratar a una empresa especializada. Les
comuniqué, la necesidad que tenía
de ponerme, en contacto, con el
resto de los hermanos y herederos del
piso, tercero. Pero, daban largas,
diciéndome que el, Sr. Don Paco, tenía un poder para actuar, en nombre de todos,
ellos. Cuando les comuniqué, el nombre de la compañía para valorar, los daños, me dijeron que bien,
que pagase, la factura y que luego, se harían cuentas. Pagué, en 1997, 382.000,
pesetas, a la empresa, Labein. Aún estoy esperando, el pago de la parte que
corresponde, a cada vecino.
Compran, el, segundo, piso que estaba vacío.
¡Yo, encantada! Se tenía que regularizar
la situación del edificio…ley horizontal. Me encargaron de registrar, el libro
de actas. ¡Yo más que encantada! Pero, para hacer, efectivo, el libro de actas tenía que constar:
1)
La firma de todos los propietarios, o, en su lugar, un poder especifico para
tal fin.
2) Relación de las cuentas
de la comunidad.
No hubo lo que se pedía y desde, entonces,
hasta, la actualidad, los dos únicos vecinos del edificio han hecho y desecho
lo que han querido. Muchas, de las cosas, con el beneplácito y consentimiento,
del ayuntamiento de Portugalete.
Hechos, relevantes fueron, las obras que
realizó en su vivienda, el vecino, del segundo. Primero, empezó ¡como no! Con
las termitas…Habían termitas…!Ja! pensé para mi…de dos patas… Y venga, estudio
de termitas… ¡Y dinero al termitero! La estructura está dañada…que si la
viguita…que si la vigota… ¡Y más y más
dinero, al termitero… y bota, idiota!
Obras en el segundo piso! Portal y
escalera al retortero… ¡De vergüenza! Yo, reclamando, denunciando y el vecino
del tercero, insultándome, manipulando, los contadores de luz del
garaje…llamándome, hija de puta, delante, de testigos porque, el inspector de
la luz estaba, en el garaje controlando…Y el vecino arquitecto del
segundo…como, el Ocaso…ni caso…
No, salgo de, mí, asombro, cuando veo, con
estos ojitos, sumándose, al lanzamiento
de piedras, anguilas, escupitajos, orines, que… empiezan, a lanzar por las
ventanas, el escombro del vaciado del piso segundo.
No, habían protegido, la fachada y
tiraban, los escombros, desde, la ventana. Cuando, no, una pala mecánica que
hacia, las obras del hotel recogía, los escombros por la ventana del segundo
piso y los depositaba, en el gran socavón, para rellenar lo que, el reflujo de
las mareas se había llevado…
En una, de las idas y venidas de la pala
mecánica, dieron un golpe, en la fachada, arrancaron, un trozo de la repisa del
garaje y desplazaron, la bajante externa de aguas fluviales. Me tuve que poner,
delante, de la pala mecánica para que, ésa, cuadrilla de terroristas, no,
siguieran dando golpes, en la pared de mi fachada. La agresión fue tan terrible
que, si, no llega a ser por, un grupo de gente, me dan con la pala.
En la, misma, pared y a la, misma, altura,
el vecino y arquitecto del segundo, que estaba realizando obras, en su piso,
acondicionó su saneamiento. Extrajo una, antigua, tubería de hierro fundido que
afectó, a la pared, interna, del baño y habitación. ¿Adivina… adivinanza…a
quién afectó, la mudanza? ¡Al primer, piso…como está mandado!
Así, en un abrir y cerrar de ojos, tenía,
la pared que da al cantón, sin protección alguna y con la bajante de aguas
fluviales rota y desplazada. Y, la, misma, pared, en la parte interna, destrozada, por la
retirada de la tubería y el baño.
¡Venga Dios y lo vea! ¡Qué fortuita
casualidad! Por otro lado, todo el escombro se iba adhiriendo, a las persianas
recién pintadas. ¡Desastre total! ¡Ésta casa es una ruina!
Denuncié, ¿cómo no? Todo lo expuesto y más
que se va quedando por la red. Después de subirme, a un tejadillo y ver, ¡qué,
re diez! estaban haciendo, dentro, que tanto tiraban. Resultó que, en vez de
obras menores…Estaban acometiendo, obras mayores y retocando las vigas
maestras…Un grupo de jubilados, amigos y compañeros, me ayudaron a entender el
peligro que estaba corriendo, el edificio y mí vivienda. Entre, ellos, el
inolvidable y querido luchador, Victorino Peláez Cajigas, concejal del
ayuntamiento que, para ayudarme, nada pidió
a cambio, ni tan siquiera que perteneciera a su grupo político. Pedí, al
ayuntamiento de Portugalete que se inspeccionara, el fraude y el arrojo, de
escombros por la ventana.
El vecino, del segundo piso, pagó al
ayuntamiento, una multa por la
infracción cometida y a, mí, el ayuntamiento, me obligó a pagar, la inspección.
¡Pagué más por la inspección que, el vecino por la alta, peligrosa,
anticonstitucional y desaforada, infracción! ¡Qué ilusión! ¡Viva la Once y su cupón!
Otra, de las barbaridades cometidas, con
mi persona, al amparo del ayuntamiento de Portugalete fue, el cobro del recibo
del IBI. Por obra y milagros de San Primo pusieron el recibo del IBI del
garaje, a mi nombre, pero con la denominación, a nombre de la empresa, Alberdi
S.A. Solicité la segregación del recibo del IBI, a mi nombre y tardaron, más, de diez años en
ponerlo.
Y, yo, denunciando…y reclamando mis derechos…
¡Y no hay tía…ni sobrina que valga!
Cómo veían que, no, me achicaba y
denunciaba…y denunciaba… ¡solo, me falto denunciar, al monaguillo!
Los dos, únicos, vecinos y propietarios a
saber: 3º, piso, herederos, Alberdi Terrancle, quién actuaba, en nombre de los
mencionados era, Francisco Martín García, hermano del gerente de SURPOSA,
Javier Martín García.
2º, piso, arquitecto, Joseba Bikendi
Martínez Goiri y Consuelo Teresa García Fernández. En ese momento, el
arquitecto, trabajaba para el ayuntamiento de Portugalete, la Intermodal y la obra
ejecutada, en el piso, 2º, del edificio, se realizó para crear, un estudio de
arquitectos.
Estos dos, únicos, vecinos, convocaban
reuniones, hacían lo que les venía en gana. No, enseñaban, el poder con el que,
según, el Sr. Don, Paco actuaba. No, mostraban presupuestos, antes, de acometer
arreglos. No, entregaban copia de
factura de gastos. No, dieron cuentas
para legalizar, la división horizontal.
No, pagaron la parte que correspondía de la factura de Labein. No,
pagaron lo que faltaba del alquiler del garaje…Y sobre todo, no, arreglaron,
los desperfectos que habían ocasionado, en la fachada ni el desastre que habían
causado, a mi baño y habitación. Y lo que no se puede entender… aunque… se…
entienda… ¡No, realizaron denuncia, alguna, en contra de la entidad y
responsables de las obras del hotel! A pesar, que la altura de la, nueva,
construcción del, Gran Hotel de Portugalete, Hotel Puente Colgante, rebasaba, una planta, al anterior edificio y
restando vuelo y luz, al edificio de las viviendas de la comunidad, dónde,
está, también, mi vivienda.
¡Qué buenas son las monjitas de mi pueblo
qué buenas son que nos llevan de excursión!
- Después de casi dos años de peticiones
de arreglo y contra peticiones. La bajante, de las aguas fluviales exterior, tuve que mandarla arreglar, yo, y
pagar la factura de mí bolsillo, otra,
factura que, aún, no me han abonado-
Mientras tanto, esos, dos vecinos se
dedicaron a arreglar, cosas, menos, necesarias que, el arreglo de la bajante
fluvial.
-Al estar desplazada y rota, el agua
fluvial se esparcía por, toda, la pared, en deterioro del edificio y
principalmente del primer piso. Pues, como he dicho, anteriormente, la ruptura
y desplazamiento de la bajante, aconteció, por obra y milagros del espíritu
santo, en la parte de fachada situada, en mi piso, no, en el de, los mundanos.-
Decidían ellos, lo que querían, como
querían y cuando querían. La etapa siguiente, de éste calvario fueron, las
denuncias por morosidad. Se dedicaron a denunciarme por morosa, alegando que,
yo, no pagaba, a la comunidad.
-Solo con la factura de Labein, había,
adelantado, el pago a la comunidad por, más, de diez años, según, la cuota que,
hasta, entonces se estaba pagando. Eso, sin, contar, lo que el Sr. Don,
Francisco Martín García, faltaba de
pagar del garaje y de la luz. A esa cifra, hay que añadir, la factura de la
bajante fluvial, más, los IBIS pagados,
íntegros, a mi nombre. Pero con la denominación y NIF de la empresa, Alberdi
S.A. ¿Es un fraude?… ¿Qué… será?… ¡Una mierda…almacenaa!
- Tuve que pagar, el recibo integro. O lo
pagaba o me embargaban. Lo tenían muy bien preparado. Denuncié, los hechos en
el Ayuntamiento y en hacienda-
Realizaban la denuncia por morosa. Yo,
contrataba un abogado. Y tan sencillo como es aconsejarme y decirme: Mira,
primero depositas la cifra que te piden, en el juzgado y después, reclamamos la
suma que te debe, la comunidad. Un
abogado… y otro… y otro… Recogían, los documentos y facturas que tenía a mano y
nada de nada…Es más, un de esos picapleitos, sin, darme, la respuesta por
escrito… era lo que yo pedía, para saber, por qué se había perdido el pleito…
Un buen día, ese, eletrado me reclama por
morosa, la cifra a pagar, decía, que, yo, no le quería pagar. Luego, se supo, quién, era y
para quienes trabajaba, pero, cuando sucedió, yo, no lo sabía.
A todo esto, la correspondencia, no, me
llegaba. Como habían arrancado, el buzón, alquilé un apartado de correo. La
correspondencia de importancia, o sea, los certificados seguían sin llegar y
cuando llegaban, el tiempo había caducado. Estuve hablando, con correos de
Portugalete. Me miraban, con cara de ofendidos
como, si, traspapelar, un aviso fuera, imposible, en correos.
En una de esas, ausencias, de avisos. Tuvo
que ser algo, así, porque, yo,
vivía debajo de los dos vecinos. Todos
los días salía, al jardín. Mantenía, una vida social notoria y con todo eso,
los dos vecinos y las autoridades, pertinentes, no me localizaban, en casa.
¡Comedores de impuestos!
La familia, Alberdi Terrancle, cuyos
miembros son: Luís Alberdi Terrancle, Javier Alberdi Terrancle, Magdalena
Alberdi Terrancle y Maria del Carmen Alberdi Terrancle, (actuando con poder, en
el nombre de todos ellos, el cuñado, Francisco Martín García), y la familia, Martínez Goiri, me embargaron,
todas, las cuentas y toda la propiedad. Ahora, bien, la cuenta bancaria que,
por si sola, podía responder, a mil
ochocientos y picos euros que era lo que, yo, debía a la comunidad, según las
cuentas que elaboraron estos, dos, únicos y buenos, vecinos… ¡esa cuenta no la
embargaron! ¿Por qué será?
-Curiosamente, la familia, Alberdi Terrancle, alquila,
durante dos años, sin mi permiso,
mi parcela de garaje. Yo, en vez
de denunciarles por lo que estima la ley, en
delito penal. Interpongo, un acto de conciliación en el cual, la citada,
familia se compromete, a devolver lo cobrado, en alquiler, y, a dejarnos entrar
y tomar posesión del tercio de camarote. Juzgado de Paz de Portugalete, copias
originales no manipuladas, en todas partes. Aún, sigo sin poder entrar, en el
tercio del camarote, de la esquina que
da, al muelle y al cantón.
Es tan escandaloso, lo que han hecho y
siguen haciendo, las dos familias, mencionadas, que desde, la compra de la
vivienda, en 1995, hasta, la actualidad, no, nos han dejado tomar parte de, la
administración de la comunidad. Y lo terrible del asunto es que, estas
familias, contrataron, un abogado, el
Sr., Don, Frutos, que venía, a las reuniones, a intentar convencerme que, yo,
tenía que firmar los acuerdos, aún, sin ver el poder y aunque, que no estuviera
de acuerdo y que tenía que pagar, lo que no debía. Para, más, recochineo, a ese
letrado, le pagaba, la comunidad, con parte de mi dinero. Y en las actas, no reflejaban nada de lo que, yo, reclamaba,
y reclamo, a saber: que, el Sr. Don, Francisco Martín García, enseñara, el
poder de sus cuñados, para actuar, en su nombre, en todas y cada unas de las
decisiones de la vivienda. El pago, de la parte proporcional, de la factura de Labein. Denuncia de los
desperfectos ocasionados por, la obra
del hotel. Arreglo de los desperfectos causados, por las obras, del 2º, dentro y fuera. Arreglo, inmediato de la
bajante…-
La intimidación, el, brutal, acoso,
también, ha sido ejercido y sigue
siendo, por parte del Ayuntamiento y de la Fundación o patronato, Manuel Calvo. Antes, por
la desidia, falta de coherencia, apoyo incondicional y agravio comparativo,
respeto, a las obras que se estaban realizando, en el solar del, antiguo, hotel
de Portugalete, en deterioro total del
edificio, donde está ubicada mi vivienda.
Ninguna, entidad del Ayuntamiento o de la Fundación , hizo nada,
para proteger, una propiedad, tan, privada como
es, el solar dónde se realizaron
las obras del hotel… ¡mí casa! Ni alcalde, ni concejal de urbanismo, ni párroco
levantaron, un solo dedo para poner freno, a la barbarie que se estaba
cometiendo. Ni tan siquiera por justicia…
-Y…
En mítines y en sermones, se les llena la boca de
sentimientos y de razones…ones… ¡Ja! Sin vergüenzas, usureros, camaleones, ¿a
quién dirigís, vuestras igualdades y vuestras oraciones?
¿A
ricos futbolistas que por treinta monedas de plata están, en afanada lista?
O… a cocineros… primero, quitan la piel,
la condimentan y mañana… parrilla de osa, a la pimienta.-
Y ahora, cuando, los Unos y los
Okelas, han destrozado, por dentro y por
fuera, el edificio y la hoya de pan… de Manueles y de Manuelas.
Ahora, vienen… los mete miedos, del
ayuntamiento de Portugalete. Y vienen los muy…
muy… con normas, leyes, artículos, decretos, adecuaciones de normativas… ¡Y qué
se yo! Las aberraciones legislativas, los abusos de poder que se ha
cometido y se sigue cometiendo,
con el edificio, sito, en C/María
Díaz de Haro, 4, de Portugalete. (Existen fotos, antes, de las obras del
hotel y después. Hay fotos y videos del portal, de mi casa y de las escaleras,
antes, y después, de las obras, del 2º, piso. Y, principalmente, hay artículos
de prensa y testimonio de vecinos que no dejan mentir, ni falsear.
¡Abusadores! ¡Fariseos!
Después, de lo expuesto, claro, está que,
las otras, dos familias y únicas propietarias del inmueble, acatan, muy
gustosamente, las recomendaciones, presuntamente, estipuladas, marcadas,
dirigidas y amañadas, por la
Fundación o Patronato Manuel Calvo y por sus representantes,
Alcalde, concejal de obras y párroco, o viceversa porque, en este caso, tanto
monta, monta tanto…¡los mulos de éstos mea santos!
¡Qué ejemplo de ética, a propagar! Toda
una jerarquía, oficialmente, constituida y pagada con los impuestos de la
ciudadanía. Se juntan, para cometer cuantos… presuntos, de presuntos, por
presuntos, más que presuntos, eternamente presuntos y por, siempre, presuntos, prescritos, agravios
comparativos, que sea menester, contra, una pequeña e hipotecada, propiedad,
privada, que pertenece, a una mujer. Sola.
En favor, de una asociación, en
su momento, benéfica, hoy en día, convertida, en negocio, mondo y orondo, de un
grupo de empresarios, adinerados y bien considerados.
- ¡Aupa el Atletic! ¡Bonito del Norte! Y
que viva la ABAO. Ella ,
no es de aquí y nosotros de Bilbao. Que
le den, muchas, morcillas para
nosotros… el bacalao y a los pobres de
Portugalete que les pongan, un…retrete.-
¿Qué hacen, los asaltadores, con una mujer
sola e indignada?
Lo que se ha hecho y se sigue repitiendo, per seculo seculorum. Omitirla. Ningunearla
Insultarla. Calumniarla. Vejarla. Escupirla. Apedrearla. Apalearla. Encerrarla. Quitarla, si, preciso su voz y su palabra, con el único fin de, ROBARLA.
“El artículo 451 del Código Penal castiga al que "con conocimiento
de la comisión de un delito y sin haber intervenido en el mismo como autor o
cómplice, interviniere con posterioridad a su ejecución ocultando, alterando o
inutilizando el cuerpo, los efectos o los instrumentos de un delito para
impedir su descubrimiento".
Continuará…
María Evangelina Cobo Zaballa
Castro-Urdiales (Cantabria)