Según,
el hilo que voy largando y si atáis cabos, no,
hace falta decir que lo sucedido, en Portugalete, con mi
casa es, igual,
si, no, parecido, a lo que acontece, en Castro-Urdiales, con
el local. Falta una precisión, los acosos, se ejecutaron a la vez.
Los
malhechores, después, de seleccionarme, iniciaron su, habitual, método
paralelo. Primero, la propiedad a tragar. Luego, acabar con el mínimo ingreso.
En
Castro-Urdiales, empezaron con hacerme la vida imposible para adecuar,
el piso y convertirlo,
en local. Era necesario, dos, servicios. Curiosamente, el piso, siempre, había
funcionado como local y nunca habían tenido problemas. Nos pararon las obras,
sin, razón. Todo estaba en orden. Y más…
Cuando,
por el desastre de Portugalete, tuvimos que finiquitar, la pequeña empresa
creada con, tanto, sacrificio. Fueron de cabeza, a entorpecer, el dinero
del alquiler que percibía. ¡Y lo han conseguido!
Realidades
comunes de las propiedades a engullir:
En
Portugalete, las dos familias, implicadas, tienen relación directa con, el
ayuntamiento, el ramo de la construcción y rehabilitación.
En
Castro-Urdiales, más o menos parecido.
MÉTODO
DE CONTROL Y DE ACOSO
Las
termitas, se organizan por bandos y horarios: Los que dicen ser, del pen, de
tal a tal hora, los que aseguran ser del pan, lo mismo y los que van rezando,
se van turnando. Están sentaditos, en los puntos clave, plazas, parada de
autobuses. Se encuentra, en las esquinas y cuando te demoras, en
algún sitio, aparece, un familiar, el funcionario amigo, u, el infeliz que
tiene, la
desgracia de ser un disminuido y la de haber sido seleccionado por los
bandidos, para hacer pequeños trabajillos. En Castro-Urdiales, cada partidillo
tiene su monaguillo…Y les sale espuma por la boca cuando hablan de Franco.
¡Re contra corcholis! Ya, sabemos como se las traen y se los llevan, las
dictaduras, pero, a estas alturas de la democracia que exista, semejante, maula
es para morirse de asco.
-¡Cobardes,
ni lo soñéis! No pienso morirme hasta no terminar de contar los
pormenores de esta sarta de chorizos y de asaltadores tutifruti que se han
merendado mi
vida y vidas
pasadas.-
Una
vez de saber donde va, la osa, en cuestión, solo, tienen que dar al móvil, a
Internet o dónde les venga, más, fácil e inmediato. Y comienza otro tipo de
acoso. El acoso a tus razones, tus derechos humanos, constitucionales, de
consumidor, etc.… es de ¡venga Dios al mundo! Entras, en un comercio.
Conciertas, el precio del arreglo de unas prendas. Pagas la factura. Y cuando
llegas, a casa, constatas que, unas prendas están, sin, tocar y las que dicen
han arreglado no tienen remedio, te las han desgraciado. Vas, a reclamar y
sueltan que te habían entregado, la ropa, en perfecto estado.
-
Era, en la boutique de mi abuela, Gabriela, dónde cambiaban por medias, todas,
las enteras.-
Encargas
la confección de unas cortinas, aceptas, el presupuesto y te pasan,
factura, tres veces más de lo que se había acordado...
verbalmente. Todo, ello, con una buena ración de fumigación, a la pimienta o lo
que sea que me echaban esos delincuentes…y…han llegado al punto de... Fui, a
una peluquería de Bilbao, a cortar y teñir el pelo.
Cuando
me preguntaron el color que quería. Les dije, en la gama de los cobrizos,
menos, rojo, cualquiera. Me tiñeron el pelo de rojo, de un rojo fosforito e
insistían e insistían que no era rojo. Cómo vieron que empecé a alborotar, el
salón, preguntando, a la primera que venía qué color me habían puesto y
diciendo, a continuación, bien, alto: me habéis puesto, un color que yo no
he pedido...yo no he pedido éste color... Vino, la dueña, a decir que
si… había sido una confusión…que si… Me tuvieron cuatro horas a remojo. ¡Vamos,
que iba a que me pusieran bonita y me dejaron como una bacalada a la vizcaína!
Sucedió en la peluquería de, Robanda Alliestarán. Y cierto es
que, todos,
los caminos llevaban a Roma…porque se afirma que, la
peluquería, en cuestión, está relacionada con la flor y la nata, al pil-pil.
El
episodio del saca muelas y sus consecuencias… ¡de terror nazi! Una conocida se
acababa de poner unas fundas y estaba tan favorecida que, en
vez de, un viajecito, decidí gastar, el dinero en ponerme unas fundas en la
parte superior. ¡La vida entera pensando en, todos, menos, en mí!
-A
propósito, controladores, la cabeza pensante de las inversiones, durante, el
matrimonio era la mía. Después de la separación, con lo poco que me dio mi
madre y mi capacidad, hice lo que tengo y que estáis, empecinados, en robarme,
como hicisteis con Jacinto y la empresa, Conservas Nicola Lo Coco SA. De los
bienes gananciales, iros a controlar a la familia, Lo Coco Cortázar, a la
familia Arenal y amiguetes. Investigar quienes tienen las patentes, la
maquinaria, las furgonetas, los coches, la motora. Y, sobre todo, en manos de
quienes están las propiedades de, aquí, y de Castellón de la Plana. Iros a
controlar, al ayuntamiento de Castro-Urdiales o al de Portugalete.
Si
llego a tener, en mis manos, todo, lo que se ha llevado a cabo, en este pueblo,
hoy, tendríamos más que un súper habit.
Tú,
sí tú, comedor que estás tirado, en los bares sin dar golpe… ¡Qué vienes a
decirme que, si, como rabas…! Tú, sí, media oreja…vete a controlar, las arcas
del ayuntamiento que buena falta hace… -
Tenía
la dentadura potable, me faltaba sólo una pieza y el resto estaba,
correctamente, saneada. Pero los empastes habían ennegrecido, las piezas y
estéticamente, se podía mejorar. Al ser de la opinión que, si, se
puede hay que mejorar lo que se pueda. Apliqué la teoría y me fui al dentista.
Había estado anteriormente. Le dije lo que quería y consulté su parecer. Todo
bien, incluido, el precio. Salí con los dientes hechos un primor. Hasta que, a
los cuatro meses del cambio, la parte superior se cayó. Según, los
dentistas consultados no se podía hacer nada porque, el saca muelas, había
tallado al máximo cada pieza y el mismo peso las hacía caer. No tuve más
remedio que extraer todas las piezas.
-¡El
que... un... argentino... sea un…no, quiere decir que, todos, los argentinos lo
sean! Sobre, dientes, muelas y completas tengo, un historial que se le ponen de
punta los pelos, al mismísimo, Drácula…-
A
todo esto, conseguí relacionar, el porqué solo me seguía una persona. Siempre,
la misma y a la misma hora fuera dónde fuera a dar la vuelta habitual. Estoy
hablando del Polifemo, el remero y el Truhán. No ha sido moco de pavo... solo
caí, en la cuenta, cuando tuve que leer, nuevamente, los papeles y
los nombres las personas que fueron de testigos, en el juicio del
pedofilo. Una pieza fundamental era el psicólogo. Y, el psicólogo, en el
segundo juicio, no, se desdijo de lo anterior, siguió manifestando que, la
personalidad de Jacinto, rayaba, la normalidad y sus marcadas tendencias
homosexuales…Pero mintió, en una cosa…
En
el momento,
enhebré el hilo que me faltaba para seguir repasando este terrible
acoso…Durante, las sesiones de investigación psicológica, a las que nos
sometimos mis hijos y,
yo, nos hicieron varios test, en las Arenas y en Valdecilla. Lo recuerdo cómo
si fuera ayer. En
uno de los test, el psicólogo, me mostraba, una serie de fotografías. De las
que enseñaba,
yo, escogía a una persona que estaba sola, ninguna, de las veces, en
grupo. Como tengo la manía de preguntar, le pregunté, por qué elijo,
al que está sólo y
el me contestó, eso hace parte de tu personalidad…
Caí,
en la cuenta que el método de acoso estaba pensado e ideado por un psicólogo
que sabía mí personalidad… Para tener certeza que era, el cuis, y, solo, el
cuis quién llevó y lleva, a fin, este macabro y sin par acoso. Simplemente,
tuve que observar: en el pueblo de Castro-Urdiales quienes me
rodeaban... Familiares directos. Dónde trabajaban... En el ayuntamiento de
Castro-Urdiales. Qué puestos ocupaban, en organismos relacionados con la
importación o exportación, el de la Virgen Santa y los Santos Apóstoles. Dónde se
movían. Las Arenas. Portugalete. Castro-Urdiales. Un ex cerdote, reconvertido
en psicólogo era y es, sin lugar a dudas, el artífice de la persecución, sin
tregua. Y, mucho, me temo, uno de los que participó, en mí secuestro en
Zamudio.
-Tengo
muy, claro, la diferencia entre cura y ¡Sal cerdote! Los primeros, se ocupan de
curar, el espíritu de todos, inocentes y pecadores. Los, otros, ocupan,
sonsacan y se aprovechan de lo que pueden, en beneficio propio. No, dejan de
ser hombres por lo que entran, sin dificultad, en el bando de los asaltadores.
Sr. Don, Cuis Rique del Rique, estoy segura de que, cuando vino, el Ilmo.,
y Excmo., Gaetano Lo Coco Cortázar, repartisteis, la manjúa y dejasteis, mí
vida y la de mís hijos rota por, todos, los lados. Así, Sr. Don, Cuis Rique del
Rique, conseguiste, a tú Virgencita…y colocaste a cada una de tus
estampitas, bien, cerquita del milagroso, Sagrario, comiendo
y bebiendo de
mi carne y de mi sangre y dándome, a diestro y siniestro, hostias... sin
consagrar. ¡Criminal! Tú nombre, apellidos y la de todos los tuyos, además, de
los lugares que ocupáis. Qué teníais, antes, del pacto negociado, qué
obtuvisteis, después, y qué tenéis, ahora, lo sabe mucha,
mucha, gente.-
El
grupo de bandidos son, tan, eficaces que, no, pierden detalle. Te envían, como
quién, no, quiere, la cosa, acompañantes, camuflados de amigas, amigos, primas,
primos, tenderos…Todos ellos, con los cinco sentidos y alguno más puesto, en tu
quehacer diario. Cualquier dato por insignificante que parezca, a toda, esa,
gentuza, le puede suponer, una, dávida a recibir por los Cuatreros. La
recompensa viene dada, en puestos de trabajo, reducción de algún impuesto, o,
simplemente, en una palmadita con promesa de un futuro mejor.
La
turbulenta época,
“del amante del colmo”, fue de traca. Ni en las fallas de Valencia se ha
desperdiciado tanta pólvora. En uno de los pueblos, no digo cual, por respeto.
Hubo el casorio de un vejestón, con una mujer joven. Y éstos cocodrilos, en vez
de, enviarme, a San Jorge, me envían a Matusalén, que
de un soplido, seguro, hago que le brote el pelo. Pues, nada
lo que te cuento moreno... estaban haciendo ver que, el susodicho, era mi
amante... Fueron, unos ex alumnos quienes me advirtieron... nada más sales, se
pone delante de la puerta de tu casa, fulanito de tal. Con, tal, mancebo, otros
de la especie, se animaron…¡ Uno... más... y monto una
residencia!
Más
tarde aparecieron como amantes del colmo, Juan y Pínchame. Juan se cayó… ¿Quién
se quedó? En éste caso, ninguno de los dos…
Por,
aquellos, funestos, días frecuentaba, una tienda de ultramarinos. Aquello, olía
a peste humana. Pero… como dice, el refrán, cuando no hay pan buenas son
tortas. Y, da casualidad que la tendera, en cuestión, había
horneado, unos, cuantos, panes con, Jacinto el Hermoso, cuando apenas
tenía dieciséis añitos... Y, yo, quería saber cuantos panes y, si,
también, había habido algún que otro pez, como decían, Carrasco y Julito...
Primero,
se presentó, Juan. Nada más entrar se me alteró el espíritu. Qué figura tan
siniestra, pensé... Se deshacía, en monerías y ostentación. Cuando empezó a
decir que, él, era el sobrino, del hijo, del cuñado, del amigo, que era no se
qué, de no se cuanto…Pensé otro…Jacinto. El siniestro y asqueroso, personaje,
se dedicaba a cotillear de, todo, Cristo, coronándoles, según, le venía bien.
Tenía el mal gusto de contar batallitas de mujeres. Entre col y col soltaba,
una calabaza de dimensiones, increíbles…En una de sus verborreas, cacareó que
su mujer estaba perdida de los nervios. Y tanto pensé… ¡Como para no estar,
teniendo al cocinillas de marras! Me podía imaginar, a su mujer día, tras, día sufriendo,
el complejo diario, de aquel repugnante marido que para, ser, tenía que decir que era
el sobrino, del hijo, del cuñado, del amigo, que era no se
qué, de no se cuanto. Con lo fatuo y pan sin sal que parecía, cuando
discutiría, le diría a la parienta, porque, yo soy… ¡Oh, cielos que horror!
No
pasaron dos días y en el ultramarinos se presentó otro de esos especimenes
raros, raros, raros… Estaba como engomado. Más, que, re que te peinado. Con
unas maneras comprimidas y resabidas. Daba, asquito mirarle. Cuando abría la
boquita, chiquitita, de muñequito, bonito, apartado del jueguecito, por pedorro
y viejecito… Solo te quedaba la compasión. ¡Qué se le va a hacer, si quiere
parecer lo que no es! Nada.
Lo
endiablado de estos mequetrefes era que se habían propuesto hacer lo mismo que
Matusalem. Y me los encontraba por todas partes. Iba a la compra. Allí, estaba
el uno y a continuación... el otro. Muy sonrientes, educadísimos y
cordialísimos, empeñados en que fuera a tomar un café. Y yo dando largas…Y
saludando, como tengo costumbre. ¡Qué re diez de café ni ocho cuartos! iba a
tomar con un par de maricones arrinconados.A tiempo aprendí que los
homosexuales, vergonzantes, camuflaban su estúpido complejo llevando, al lado,
a una mujer. ¡A buenas horas mangas verdes! Cuando se empezaron a poner
agresivos… corté el saludo. Cuando, aún, cortando, el saludo esos dos
morcillos, insistían en saludarme y hacían ver que éramos íntimos. Les dije
claramente que tenía costumbre de elegir las amistades y que la suya, no,
me interesaban para nada. Como insistían, en el saludito, con sonrisita y
ojitos de intimidad, les dije en voz alta y delante de la platea que ya
le había repetido varias veces que su persona no entra en mi abanico de
amistades y que su saludo... me ofendía.
Como
sucede, me enteré que los dos crápulas venían de dos grupos distintos pero que
hacían parte del mismo termitero. Este tipo de personas que, a pesar de
rechazarlas, varias y repetidas veces, insistían en hacerse pasar por amistades
y seguían, saludándome, incluso, a grito pelado. Me ha
sucedido a menudo. No es una exageración, sencillamente, es el método que
habían encontrado, los malhechores para tenerme controlada y aparentemente,
dueños y dueñas de mi vida. Me enteré, por pura casualidad que, dos de esas
personas se dedicaban a contar anécdotas de mi vida que jamás han sucedido.
Vamos, que a su manera iban dando, una imagen preparada para surtir el efecto
deseado. El siniestro, Juan, en sus habituales cocinillas se dedicaba a decir
que era una desgraciada, a falta de macho y que estaba sola porque no me
funcionaba la
cabeza.
-So…
cacho, hijo de macho cabrío, en cuanto solucione cuatro cosas que tengo
pendientes, te voy a poner a caldo perejil. Cojo, de negro, calvo y mugroso…
solo tú asqueroso.-
Al
indecente de Pínchame, no, se le ocurre otra cosa que decir, al grupo, que yo
le había insultado. Menos mal, que todavía existe gente prudente.
-A
quién quieres engañar, tú, pajarito de agua dulce, a la madre al hijo o al hermano.
Las veces que has estado, detrás de mis pasos, junto con el alto de
Portugalete. Como... hacía tiempo... había denunciado los hechos a
personas de mi confianza... os... pescaron... en fragrante... Estás como lo que
eres, un reprimido sofocado, en un armario lleno de bolitas de alcanfor y
hueles que apestas. En cuanto pueda, te sacaré a ventilar, en letrillas
especiales para el evento.-
Mi
situación actual:
En
Portugalete, los propietarios hacen lo de siempre. Sigo sin poder tomar
posesión del tercio de camarote especificado, en escritura.
Siguen,
sin , pagar la
parte proporcional de la factura de Labein. Sin, pagar la parte proporcional de
la bajante externa de la tubería de aguas fluviales. Sin, pagar los IBIS
Sigo,
sin poder participar, en la administración de las cuentas. Mis peticiones
siguen, sin, ser recogidas, en acta. Están arreglando los desperfectos
ocasionado por las obras del Hotel y las obras del, 2º, piso, con el
dinero de uno. Me he visto obligada a meterme, en un préstamo
bancario para arreglar, el tejado. Tengo que meterme, no sé donde para
conseguir, el dinero para arreglar, la fachada que las obras del Gran Hotel o
Hotel Puente Colgante ha destrozado.
El
ayuntamiento de Portugalete, ahora, envía apremios para rehabilitar la fachada
sob pena de derribo.
En
Castro-Urdiales, desde hace diez meses no pagan el alquiler y más de dos años
que no pagan, el agua. No han hecho gestión alguna para, el arreglo inmediato
de los desperfectos ocasionados por el piso segundo, en el local.
-Carmen,
y toda su familia son gente de iglesia muy caritativa y metió, en el
piso a
los rumanos, como obra del amor hermoso. Según, los rumanos,
los sacó de un piso que tenían alquilado, en el número tres de la misma
calle para
que llevasen, al piso que Carmen les dejaba, a la familia que quisieran y que,
al parecer, estaba
desperdigada, en territorio apache. Sucede que, esa alma, buena y caritativa,
se olvidó de acondicionar, la vivienda a los desvalidos rumanos y éstos,
inundaban, el local, día si y día, también. Y fueron tan obedientes, tan
obedientes, los infelices que estuvieron hacinados unos veinte y tantos y para
beneplácito de su hada madrina, ¡hasta subieron, una oveja! Después de
denuncias y contra denuncias y la rápida actuación de la Guardia Civil los
rumanos fueron a mejor vivienda y la, caritativa, alma vendió la propiedad.-
Los
propietarios que compraron el piso a Carmen no se quienes son. Mas, si, el
local se ha vuelto a inundar, según el inquilino, desde arriba, es de suponer
que no se arregló la avería.
Total,
no percibo, el alquiler, pero, tengo que pagar a hacienda y el recibo del agua
etc.…A los inquilinos, les he dado, como siempre, todo tipo de facilidades,
incluido, la compra del inmueble. Me conformaba con que dieran un porcentaje de
entrada y que, el alquiler, sirviera de cuota. Nada de nada. ¿Qué quieren,
entonces? Lo mismo que los otros…¿Verdad?
http://www.youtube.com/watch?v=gBD3IdI1RmI
Documentos
Alla vera carne de mi carne…
Memoria histórica: el
trapicheo
Carta abierta a un Excmo., e
Ilmo., Porco
El comedor de anchoas
María
Evangelina Cobo Zaballa
Castro-Urdiales (Cantabria)