Fotografía de:
María Evangelina Cobo Zaballa
Era una cesta de mimbre
Era una cesta encantada
Iba a la plaza vacía
Venía llena de gracia.
Media docena de huevos
Resultaban siempre doce.
Las lechugas las patatas
A menudo se doblaban.
Naranjas uvas manzanas
Sumaban multiplicaban.
Y tres plátanos dorados
Como lindos relicarios
Bendecían el milagro
De Santa Basi y Rosario.
María Evangelina Cobo Zaballa
Castro-Urdiales (Cantabria)