Entre
*balcones
Atajos
corruptosEsquinas abocados
Primos y callejones
Han manipulado
Vida Imagen
Futuro Intimidad
Se han tragado
Y quieren seguir
Tragándose
Todas mis posesiones
¿No
son verdad, Daniel,
Las
maniobritas de hiel?¿No es así Rufino
Como terciaste el tocino?
¿Mucho arroba mucho más?
¡La candela prenderá!
Watson,
cariño, no tengo tiempo. No puedo explicártelo con pelillos, escamillas o en
arco-iris…Sólo te digo que ayer, por la tarde, estaban haciendo la ronda los
corruptos de siempre…en cada punto estratégico está dispuesto un ladrón,
familiar, amigo o beneficiario. Si las autoridades quisieran lo tienen fácil…Pues,
como te iba contando…por detrás de la plaza del mercado, una huevita o algo
parecido…en la esquina, frente a la peluquería, la mamá de la huevita…
¿La
que se acordó de tu madre?
Tengo
prisa…Ya sabes… quien espera desespera, pero, estoy tan acostumbra al deseo de
Godot que me quedé…por si sonaba la flauta. ¡Y sonó! De esta vez no vino, a mi encuentro, ninguno de la familia
Cromañón, no. Vino el hijo de la Tina de Olivas. No hace
mucho, el mismo teatro mafioso… no me di cuenta de quién era. Y, como conozco a
tanta gente y tan diversa…solamente me
extrañó la efusiva manifestación…Hasta que me percaté…Rebosando requiebros como
si me conociese de toda la vida… ¡Vade retro! Cuando, ayer, coincidieron los
corruptos no tuve duda de tal oliva y tal mochuelo… ¡Vade retro! Cuando vino a
repetir las posturitas y ademanes de pública escuela…Esquivé el saludo… de
brazos abiertos sonrisa a lo aquí te pillo aquí te mato… y seguí mi camino…Contrariado,
el mochuelo comenzó el habitual ritual de desprestigio que mantiene toda esta
canalla de diodones, cocodrilos y caimanes. Interpretando el papel asumido…como
mamá exclamaba, a voces, una serie de quejas y quejumbres… ¡Vade retro! Le
distingo no le conozco. No soy ni su
madre ni su abuela para que me venga a saludar y menos entre jacarandosos
requiebros…No sea que… ¿me entiendes, Wa? Por cierto, para matar el
gusanillo…No tengo novio, ni amante ni nada que se le parezca…Mis cuelgues emotivos están dedicados a un amor
virtual. El resto de la función… la dejo a cargo de la imaginación ¡como todo
mortal!
Te
recuerdo, Watson, que nadie tiene llave
de mi casa, ni permiso para entrar sino conmigo. Y cuando digo nadie es nadie.
Mis hijos viven independientemente. Si quieres más información. Tienen más de
cuarenta años de edad ¡pregúntaselo directamente!
*Mi
balcón es el florido... el fumigado por un…Las otras fotografías están realizadas desde
el que se ve, de refilón, el rompeolas.
Estoy
en el Aula de Cultura Eladio Laredo
Ordenador
nº, 4.http://www.hodei-missing.com/es/
María
Evangelina Cobo Zaballa
Castro-Urdiales (Cantabria)