¡Era toda una mujer!
Margot
Amaba criaba educaba
Trabajaba
Pendiente del otro yo
Sus manos de seda
Regalaban sin temor
Caricias
Que nunca exhibió
Malvas
Claveles y rosas
Desprendía su interior
¡Era toda una mujer!
Nuestra querida madre
Margot
María Evangelina Cobo Zaballa
Castro-Urdiales (Cantabria)