De
cómo un inmigrante, italiano, conseguía documentos falsos, en el ayuntamiento de
Castro-Urdiales, para beneficio propio y de las personas que lo impartían, en
deterioro de mi persona y de mis bienes gananciales.
En
1982, Jacinto Lococo Cortázar no estaba divorciado, estaba separado y los
bienes gananciales no se habían liquidado. El divorcio lo solicité y pagué, yo,
veinte años, después. Contraté a una *(1) abocada que se llevó su bocadito como
tienen costumbre los abocados corruptos y facinerosos.- ¡Conchita, pronto te
haré un Peñón!
El
divorcio se obtuvo tres años antes del fallecimiento de Jacinto Lococo
Cortázar. Todas las ventas, hipotecas y
demás negocios que se hayan realizado son fraudes con dolo, doloso. Quienes han
actuado y actúan saben que están robando de lo mío. Se han repartido mis bienes
gananciales, entre familiares, amigos y autoridades de Castro-Urdiales,
Santoña, Cantabria, Bilbao, Roma, Palermo, Santa Flavia y Porticello.
Jacinto
Lococo Cortázar, a los hijos, habidos en matrimonio, les dejó deudas de comunidad,
de amigos y la tarantella de la deuda inventada. Las deudas de comunidad y amigos las he pagado, yo.Los trámites del funeral, esquelas y demás las solucionó, mi hijo. Las facturas y el entierro lo
pagué, yo. El viaje de los restos mortales de Jacinto Lococo Cortázar a Porticello lo pagué, yo. Fácil de verificar. Lo único que
no he pagado, ni pienso pagar, es el escandaloso, abominable y mafiosísimo fraude cometido por las familias, Lo Coco
Cortázar, D´Amato Lo Coco, en el juzgado de Castro-Urdiales.
Familias
Lo Coco Cortázar y D´Amato Lo Coco, os apropiasteis de lo que no era vuestro. Jacinto Cortázar
Urresti y Narcisa Castañondo, fallecieron sin testar. Cuando entonces, a
Jacinto Cortázar Urresti , el Tribunal de Cuentas, le incautó las propiedades.
Jacinto Cortázar Urresti falleció y Narcisa Zaballa Castañondo, se quedó sola.
Uno de los hijos falleció durante la guerra civil española. El otro, estuvo
preso junto con, mi abuelo, Ángel Cobo Pérez y vecinos de Castro-Urdiales. A mi
abuelo, según, lo que contaba le salvó de muerte segura, mi abuela, Flora -Había
una relación entre nodrizas y hermanos de leche- El otro hijo de la viuda,
Narcisa Zaballa Castañondo, fue a parar en África. Tal como estaban los tiempos… ¡Cualquiera
reclamaba lo incautado! Por eso, se aprovecharon de la situación y gracias a
las hábiles puñetas del Excmo., e Ilmo., Gaetano Lo Coco Cortázar y de las autoridades
locales, rápidamente, obtuvieron lo incautado y se lo chorizaron a una mujer
sola.¡Cobardes!
Lo
mío y actual es más grave si cabe…Ciertas
autoridades de Castro-Urdiales han encubierto delito tras delito para
beneficio propio usando el poder, cuando no, la fuerza. Han creado, fomentado,
elaborado todo tipo de infracción para encubrir:
Usurpación
de propiedades incautadas por el Tribunal de Cuentas.
Construcción
de viviendas sociales en la propiedad incautada.
Venta
de las viviendas sociales a personas pudientes
Venta
de cuatro viviendas sociales a un
italiano, magistrado, del Supremo en Roma que ya tenía en su haber, en suelo
español, otra vivienda social de renta limitada, más un piso y desván.
Alquiler
de las viviendas sociales edificadas en el solar incautado y afanado.
El fantasma de la Inmobiliaria
Diodon SA.
Incesto
y pederastia de Jacinto Lococo Cortázar.
Creación
de una empresa en la Notaria Arenal con documentos falsos y mis
bienes gananciales: Conservas Nicola Lo Coco SA.
Desmantelación
de la Empresa ,
Nicola Lo Coco SA. Venta de los solares sin mi autorización.
Escucha,
Watson, que pareces dormido… te acuerdas de ¿Quién robó la cartera a Arana?
Carmen
la gitana…
Y…
¿por qué acosan a Evangelina?
Porque
los tutti fruti corruptos… ¡han
chorizado hasta la sordina!
*(1)
*(1)
María
Evangelina Cobo Zaballa
Castro-Urdiales (Cantabria)